martes, 6 de marzo de 2012

Calçots al horno: calçotada puertas adentro


Calçots preparados para ir al horno
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PsTdeViaje
Las calçotadas suelen hacerse al aire libre. Sin embargo, si por alguna razón no puede, no sufra. Los calçots también pueden hacerse en el horno de casa. 
Si por algo es famoso Valls, en la provincia de Tarragona, es por sus calçotadas. Desde finales del invierno hasta comienzo de la primavera, es la temporada tradicional para juntarse con los amigos alrededor del fuego para asar estas cebollas dulces, mojadas en salsa romesco. 
Si no puede ir a Valls, aquí le decimos cómo hacerlos en casa. 

Qué es una calçotada 
La principal característica de esta comida catalana es que se hace al aire libre, a pesar de que las temperaturas no siempre acompañan. Una vez lista la brasa, los calçots se colocan sobre una parrilla para que se vayan asando, dejando la capa exterior de esta cebolla calcinada. Cuando están casi a punto, se envuelven en papel de periódico para que terminen de hacerse con su propio calor. Otra opción muy típica son las tejas de barro, que evitan que se enfríen los calçots. Para poder degustarlos hay que pelarlos con las manos para poder acceder al interior tierno y remojarlos con la salsa de romesco. 

Calçots en el horno
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PsTdeViaje
Calçots al horno, cuando el tiempo falla 
Sin embargo, no siempre se puede hacer una calçotada como manda la tradición, o bien por la lluvia o por alguna otra razón que nos haga quedarnos con los calçots comprados. Para situaciones como esta, aunque pueda atentar contra la idea de brasa, calçots y aire libre, siempre puede recurrir al horno de su casa. Una vez que tenga los calçots, debe lavarlos, cortarle las raíces o “barbas” y pelarlos. Si son muy largos y no caben en la rejilla o en la bandeja del horno, corte un poco de la parte superior para que entren sin problema. Antes de meter los calçots al horno, debe precalentarlo a potencia máxima. Una vez dentro, debe esperar aproximadamente 35 minutos, pero para estar seguros del todo, debe apretarlos con una pinza, para saber si ya están tiernos. 

Imprescindible: salsa romesco para los calçots 
Calçots con salsa romesco
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PsTdeViaje
La salsa romesco es mejor hacerla con antelación para que pueda reposar. Para ello va a necesitar dos o tres tomates maduros, una cabeza de ajos, 80 gramos de almendras tostadas, dos ñoras, una rebanada pequeña de pan tostado, aceite de oliva, vinagre, pimentón rojo dulce y sal. Se debe precalentar el horno a 200º y poner en él los tomates, la cabeza de ajo y las ñoras para escalivarlos. Una vez que tenga eso preparado, separe los ajos, pele y limpie los tomates y las ñoras e introduzca todos los ingredientes en la batidora. Pruébela y ajuste de sal si fuera necesario. 


Complementos para una perfecta calçotada 
Ahora ya tiene todos los ingredientes para hacer una calçotada puertas adentro. Desde luego, no es lo mismo que a las brasas, pero sin lugar a dudas, quedan riquísimos. Para acompañarlos, carne o butifarras son el complemento perfecto. Para beber, con los calçots un buen cava de Sant Sadurní d`Anoia y para la carne, un vino tinto. No olvide una gran servilleta o babero para no mancharse al comer los calçots.

© Carolina Bassa Mercado, Derechos Reservados 

2 comentarios:

  1. Qué bueno saberlo, jamás los he probado así y la verdad es que algunos días, hace mucho frío. Tomo nota. Gracias!

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    1. Espero que tengas ocasión de probarlos. La verdad es que quedan bastante buenos.
      Suerte y saludos.

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